ALEX  CLARET

Mi motor es aportar mi energía y mi granito de arena a un mundo más consciente, natural y equilibrado.

Considero la educación como la semilla creadora de nuestro futuro. Por ello me apasiona enseñar.

Porque tus palabras y tu actitud pueden conseguir que tu vida y la de los que te rodean sea una absoluta belleza o una absoluta desgracia.

Educar, del latín Educare, significa extraer el conocimiento propio. No sólo dar información.

Con esa finalidad, llevo más de 10 años en el mundo de la PNL y 6 años formando personas y equipos de trabajo.

Creo que todos destacamos de manera extraordinaria en algo y que por eso cada uno tiene una historia que contar. Porque todos somos especiales, pero a veces nos olvidamos de SER y nos exigimos convertirnos en lo que DEBERÍAMOS SER. Eso crea muchos problemas.

Hoy más que nunca, es importante abandonar viejos paradigmas y sustituirlos por nuevas habilidades basadas en el desarrollo de la consciencia y la inteligencia emocional para construir un mundo mejor.

Mi propia historia está teñida de amor, de dolor y de evolución. Pero la PNL fue un punto de inflexión en mi vida porque entendí que la vida nos da alas, pero la mente puede ser de plumas o de plomo.

La verdad es que hay cambios a nivel interno que no tiene sentido esperar a hacer, y que las circunstancias externas de la vida, que son complejas y cambiantes, no pueden ser el factor más importante que dirija nuestra existencia.